domingo, 6 de septiembre de 2015

Que se preocupen de otras cosas, de las importantes de verdad


 Aunque sea uno de mis favoritos,  el rosa es el color que la sociedad “moderna” asocia a lo cursi y a la feminidad y por qué no decirlo, a la tontería.
 
Desde bien pequeñas, las niñas recibimos todo tipo de regalos con los que reflejar como debería ser nuestro futuro: cocinitas, carritos, bebés que se hacen pipi y caca… y los niños obtienen coches, metralletas, balones, equipajes de fútbol…  Ellos se dedicarán a conducir y a ir detrás de un balón en pantalón corto y ellas a las labores del hogar .
¡Que gilipollez! (con perdón, o no). 

Gracias a...  (cada un@ que dé las gracias a lo que prefiera) la sociedad ha cambiado y lo que antes se daba por sentado, hoy ya no lo es tanto. Los roles han cambiado, la mujer es profesional y delega el cuidado de la casa y de l@s hij@s a su pareja. Los hombres, ya saben pasar la aspiradora, hacer la comida, planchar la ropa, e incluso cambiar el pañal a sus hij@s, como debe ser. 

Estoy aburrida de escuchar estúpidos comentarios… Aranza, mi hijo juega con muñecas...

¿Perdona? ¿Dónde está el problema?
Jugar con muñecas, pasear un carro, disfrazarse de princesas… afectará al desarrollo del niñ@ y mucho.
Que esta clase de juegos se asocie desgraciadamente a niñas, no significa que el niño no pueda hacerlo e incluso disfrutarlo. Y no implica lo que tod@s y cada un@ de l@s comentaristas de turno vienen pensando. Esta práctica va a repercutir positivamente en la vida del pequeño, ya sea niño o niña, puesto que va a capacitarle a la hora de funcionar como parte de una familia, por mencionar uno de los beneficios.
 
Los niños que juegan con muñecas, lo hacen simplemente porque se lo pasan bien empujando el carrito, peinándolas, dándoles la papillita...  puede que lo hagan porque en casa ven a sus hermanas hacerlo, o por imitación a la mamá simulan amamantar al bebé… Y no va a condicionar su condición sexual, ya pueden  dormir tranquil@s si esa es la tontería por la que están tan preocupados.
 
Que se preocupen de otras cosas, de las importantes de verdad;
 
 ... De pasar tiempo con l@s niños, de abrazarles, de mimarles, de decirles te quiero, de ayudarles a crecer, a ser tolerantes, de poner unos límites, de reír, de contarles cuentos... de jugar con ell@s con juguetes adaptados a su edad y a sus características, que ayuden a entablar relaciones con los demás , que ayuden a desarrollar su personalidad, que le entretengan, que no sean tóxicos para su salud ni para el medio ambiente, que sean divertidos e interesantes, que rechacen comportamientos sexistas y violentos… en definitiva, dejad que juegue en libertad y que decida con lo que quiere jugar, y que sea lo que sienta ser, que para ser feliz no hace falta demasiado, y en el futuro, el querer a un hombre o a una mujer no será asunto nuestro.

Ludoteca Ibi



 
 
 
 

 
 

 

 

 

 

 

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